Compliance penal obligatorio: ¿qué es y por qué es clave para tu empresa?
Si tienes un negocio, seguramente habrás escuchado hablar del compliance penal y de su importancia. Pero, ¿realmente es obligatorio? ¿A qué empresas afecta? ¿Cuáles son las consecuencias de no cumplir con él? En este artículo te explico en detalle todo lo que necesitas saber sobre el compliance penal obligatorio, despejando dudas y aclarando su impacto en las organizaciones.
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¿Qué es el compliance penal?
El compliance penal es el conjunto de procedimientos y buenas prácticas que una empresa implementa para prevenir delitos dentro de su estructura y garantizar que su actividad cumpla con la legalidad vigente. Su objetivo principal es evitar sanciones penales a la propia empresa o a sus directivos, protegiéndola frente a posibles responsabilidades legales.
En términos simples, el compliance penal no es más que un mecanismo de autoprotección. Con él, una empresa demuestra que ha tomado medidas para prevenir delitos y minimizar riesgos legales.
¿Es obligatorio el compliance penal en España?
Aquí es donde surgen muchas dudas. El compliance penal no es obligatorio en el sentido de que todas las empresas deban tenerlo sí o sí por ley, pero sí es altamente recomendable y, en algunos casos, imprescindible para evitar sanciones.
La clave está en el Código Penal español, que establece que las empresas pueden ser penalmente responsables de los delitos cometidos en su seno. Esto significa que si una empresa no tiene un sistema de prevención de delitos adecuado, podría enfrentarse a multas millonarias, inhabilitaciones o incluso la disolución de la sociedad.
Empresas donde el compliance penal es prácticamente obligatorio
Aunque la normativa no lo exige de manera general, hay sectores y circunstancias en los que contar con un modelo de compliance penal es casi imprescindible. Algunos ejemplos son:
- Grandes empresas y multinacionales: Cuantas más operaciones y empleados tenga una empresa, mayor es el riesgo de que alguien cometa un delito dentro de ella. Es por eso que las compañías con estructuras grandes suelen tener un departamento de compliance.
- Empresas que trabajan con el sector público: Para evitar casos de corrupción o fraudes en contratos públicos, muchas administraciones exigen a sus proveedores garantías de compliance.
- Sectores regulados (banca, seguros, farmacéutica, tecnología, construcción…): Son industrias con un alto nivel de regulación, por lo que las autoridades suelen exigir sistemas de control para prevenir fraudes, blanqueo de capitales o delitos medioambientales.
- Empresas con certificaciones ISO o normativas internacionales: Algunas certificaciones requieren que la empresa cuente con un programa de compliance adecuado para operar en determinados mercados.
En estos casos, no contar con un programa de compliance puede suponer un grave riesgo, tanto en términos legales como reputacionales.
¿Qué delitos se pueden prevenir con un modelo de compliance penal?
El Código Penal establece que las empresas pueden ser responsables de ciertos delitos cometidos en su nombre o con su beneficio. Algunos de los más comunes son:
- Delitos contra la Hacienda Pública y la Seguridad Social: Fraudes fiscales, impago de impuestos o cotizaciones.
- Blanqueo de capitales: Uso de la empresa para ocultar dinero obtenido de actividades ilícitas.
- Corrupción y sobornos: Tanto en el ámbito privado como en las relaciones con la administración pública.
- Delitos medioambientales: Contaminación, vertidos ilegales o incumplimiento de normativas ecológicas.
- Delitos informáticos: Uso indebido de datos personales o ataques cibernéticos.
- Delitos contra los derechos de los trabajadores: Contratación irregular, explotación laboral o acoso en el entorno laboral.
Contar con un modelo de prevención penal no solo reduce el riesgo de que estos delitos ocurran, sino que también protege a la empresa ante posibles sanciones.
¿Qué requisitos debe cumplir un modelo de compliance penal para ser efectivo?
Tener un programa de compliance no es solo cuestión de imprimir un código de conducta y guardarlo en un cajón. Para que sea realmente efectivo y pueda servir de eximente o atenuante ante la justicia, debe cumplir una serie de requisitos:
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Identificar los riesgos penales específicos de la empresa
Cada sector y cada negocio tienen riesgos distintos. Es fundamental realizar un análisis para detectar en qué áreas pueden surgir problemas legales. -
Elaborar un código ético y de conducta
Este documento debe establecer las normas que rigen el comportamiento dentro de la empresa y definir qué prácticas están prohibidas. -
Establecer medidas de prevención y control
Se deben definir procedimientos para detectar y prevenir conductas ilícitas. Esto incluye auditorías, revisiones internas y supervisión de transacciones sospechosas. -
Designar un responsable de compliance (Compliance Officer)
Esta persona o departamento se encargará de vigilar que se cumplan las normas internas y de actuar en caso de detectar irregularidades. -
Canal de denuncias
Es importante contar con un sistema seguro y anónimo para que empleados, clientes o proveedores puedan informar sobre posibles malas prácticas sin temor a represalias. -
Formación y concienciación
No sirve de nada tener un programa de compliance si los empleados no lo conocen o no saben cómo aplicarlo. Es necesario realizar formaciones periódicas. -
Revisión y mejora continua
Las normativas y los riesgos cambian, por lo que el modelo de compliance debe actualizarse regularmente para seguir siendo efectivo.
¿Qué pasa si una empresa no tiene compliance penal y se enfrenta a un delito?
Si una empresa se ve envuelta en un proceso penal y no cuenta con un sistema de prevención, las consecuencias pueden ser graves. El Código Penal establece sanciones que van desde multas económicas hasta la disolución de la sociedad en casos graves.
Algunas de las sanciones que pueden aplicarse a las empresas son:
- Multas de hasta 10 veces el beneficio obtenido con el delito.
- Inhabilitación para recibir subvenciones o ayudas públicas.
- Prohibición de operar en determinados sectores.
- Cierre temporal o definitivo de la empresa.
- Responsabilidad personal de los directivos, que podrían enfrentarse a penas de prisión.
En cambio, si la empresa puede demostrar que tiene un programa de compliance penal bien estructurado, puede evitar o reducir estas sanciones, ya que podrá argumentar que ha hecho todo lo posible por evitar la comisión de delitos.
Aunque no todas las empresas están obligadas por ley a contar con un modelo de compliance penal, es una medida altamente recomendable para protegerse de posibles responsabilidades legales. En un mundo donde la regulación es cada vez más estricta, no disponer de un sistema de prevención de delitos puede salir muy caro.
Si tu empresa opera en sectores regulados, trabaja con administraciones públicas o simplemente quiere evitar riesgos innecesarios, contar con un modelo de compliance penal sólido puede marcar la diferencia entre afrontar sanciones millonarias o estar protegido legalmente.
En definitiva, el compliance penal no es solo un requisito legal, sino una herramienta de prevención y seguridad para cualquier negocio que quiera operar con tranquilidad y credibilidad.
Cinco datos de interés
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Implementación del compliance en grandes empresas: Según la Asociación Española de Compliance (Ascom), el 75% de las compañías con más de 200 trabajadores ya cuentan con un sistema de compliance o tienen previsto implantarlo en los próximos cinco años.
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Multas por incumplimiento normativo: Las sanciones por incumplimiento de la normativa pueden ser significativas. Por ejemplo, en el ámbito de la protección de datos, las infracciones muy graves pueden conllevar multas de hasta 20 millones de euros.
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Sanciones penales a empresas: Desde la reforma del Código Penal en 2015, se han impuesto multas a empresas por más de 700 millones de euros, principalmente por delitos fiscales, estafa y blanqueo de capitales.
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Presencia de la función de compliance según el tamaño de la empresa: El 78% de las empresas con más de 5.000 empleados cuentan con una función de compliance, mientras que este porcentaje se reduce al 38% en las empresas de menor tamaño.
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Desconocimiento de la responsabilidad legal: Un estudio de Grant Thornton reveló que el 45% de los directivos españoles desconocen la responsabilidad legal que podría acarrearles no impulsar un área de compliance en sus empresas.
Preguntas frecuentes sobre compliance penal obligatorio
¿Cuándo es obligatorio el compliance penal?
El compliance penal no es obligatorio por ley para todas las empresas, pero sí es altamente recomendable. Sin embargo, en sectores regulados (banca, seguros, farmacéutica, construcción) y en empresas que trabajan con administraciones públicas, es prácticamente imprescindible. Además, contar con un modelo de prevención de delitos puede ser un eximente de responsabilidad penal, lo que protege a la empresa en caso de infracción.
¿Qué empresas necesitan compliance?
Todas las empresas pueden beneficiarse de un sistema de compliance, pero es especialmente necesario para grandes corporaciones, empresas con alta regulación y aquellas que operan en mercados internacionales. Además, cualquier empresa que desee protegerse frente a sanciones penales debería implementar un programa de compliance adecuado.
¿Qué son las obligaciones de compliance?
Las obligaciones de compliance son las normas y procedimientos que una empresa debe cumplir para evitar riesgos legales y garantizar que su actividad se desarrolla conforme a la legislación vigente. Incluyen desde la identificación de riesgos hasta la formación de empleados y la implantación de medidas de control.
¿Qué es el compliance criminal?
El compliance criminal es una parte específica del compliance que se enfoca en prevenir delitos dentro de una empresa. Su objetivo es minimizar el riesgo de que directivos o empleados cometan infracciones penales en el ejercicio de sus funciones, asegurando que la empresa cumple con el Código Penal.
¿Qué son los programas de compliance penal?
Son conjuntos de políticas, protocolos y controles diseñados para prevenir, detectar y corregir delitos dentro de una empresa. Un programa de compliance penal debe incluir un código ético, formación para los empleados, un canal de denuncias y auditorías internas para su correcto funcionamiento.
¿Qué dice el artículo 31 bis del Código Penal?
El artículo 31 bis del Código Penal establece la responsabilidad penal de las empresas cuando sus directivos o empleados cometen delitos en su nombre o en su beneficio. También indica que una empresa puede quedar exonerada de responsabilidad si demuestra que tenía implantado un modelo de compliance eficaz.
¿Qué sanciones puede recibir una empresa por no tener compliance penal?
Las sanciones pueden incluir multas económicas millonarias, inhabilitación para contratar con la administración pública, prohibición de operar en determinados sectores, disolución de la empresa o incluso penas de prisión para los responsables.
¿Quién debe encargarse de implementar el compliance penal en una empresa?
Generalmente, el responsable de compliance es el Compliance Officer, aunque en empresas grandes suele haber un departamento dedicado a esta función. También se puede contar con asesoramiento externo de abogados especializados en compliance.
¿Cómo se puede demostrar que un programa de compliance penal es efectivo?
Para que un programa de compliance penal tenga validez legal, debe cumplir ciertos requisitos: estar bien documentado, contar con mecanismos de control y supervisión, tener un canal de denuncias interno y realizar formaciones periódicas. También es recomendable que se someta a auditorías externas para evaluar su eficacia.
¿Puede una empresa ser penalmente responsable si un empleado comete un delito?
Sí. Según el Código Penal, una empresa puede ser responsable de los delitos cometidos por sus empleados si no ha tomado medidas adecuadas para prevenirlos. Sin embargo, si la empresa cuenta con un programa de compliance penal efectivo, puede reducir su responsabilidad o incluso exonerarse completamente de las sanciones.
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