No estoy obligado a hacer la declaración de la renta pero me sale a pagar: ¿qué hacer en este caso?

Cada año, cuando llega la campaña de la renta, miles de contribuyentes se preguntan si están obligados a presentar su declaración. Muchos descubren que, según los límites establecidos por la Agencia Tributaria, no tienen la obligación de hacerla. Sin embargo, al revisar su borrador, se llevan una sorpresa: el resultado es a pagar. Y aquí surge la gran pregunta: si no estoy obligado a hacer la declaración de la renta, pero me sale a pagar, ¿tengo que presentarla igualmente?

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Si te encuentras en esta situación, es fundamental que comprendas bien las normas fiscales para tomar la mejor decisión. Como asesor fiscal para particulares con experiencia en derecho tributario, puedo decirte que no hay una única respuesta válida para todos los casos. Dependerá de diversos factores, como el origen de tus ingresos, posibles deducciones y tu planificación fiscal a largo plazo. Vamos a analizarlo en profundidad.

¿Quién está obligado a presentar la declaración de la renta?

La normativa fiscal establece unos límites de ingresos por debajo de los cuales no es obligatorio presentar la declaración. En términos generales, en la última campaña de la renta estos eran los principales límites:

  • Si solo tienes un pagador (por ejemplo, tu empresa o una pensión):

    • No estás obligado si tus ingresos anuales no superan los 22.000 euros.
  • Si tienes más de un pagador:

    • El límite baja a 15.000 euros siempre que hayas recibido más de 1.500 euros de un segundo pagador.
  • Rendimientos del capital mobiliario y ganancias patrimoniales:

    • Si provienen de intereses bancarios, dividendos o ventas de acciones, no tienes que presentar la declaración si no superan los 1.600 euros anuales.
  • Otros rendimientos sujetos a retención:

    • Si has obtenido ingresos por actividades económicas o alquileres, debes revisar caso por caso porque hay diferentes límites aplicables.

Si tus ingresos se encuentran por debajo de estos límites, la Agencia Tributaria no te obliga a presentar la declaración. Sin embargo, esto no significa que no puedas hacerlo ni que siempre sea lo más conveniente.

¿Qué pasa si el borrador me indica que debo pagar?

Aquí está la clave de la cuestión. Si revisas el borrador y el resultado es a pagar, puedes tomar dos caminos:

  • No presentarlo, porque no estás obligado.

    • En este caso, simplemente ignoras el borrador y no realizas ninguna gestión adicional.
    • No recibirás ninguna sanción porque la ley no te exige presentar la declaración.
  • Presentarlo y asumir el pago.

    • Aunque no sea obligatorio, si decides presentarlo, la Agencia Tributaria esperará el pago correspondiente.
    • Esto puede ser relevante si esperas que en el futuro tengas deducciones que puedan compensar este pago, o si quieres evitar posibles revisiones fiscales en años posteriores.

Ahora bien, si no tienes obligación de declarar, no hay ninguna consecuencia por no presentarlo, aunque el resultado del borrador te indique que debes pagar. La Agencia Tributaria no te reclamará ese importe porque no estás en el grupo de contribuyentes obligados a declarar.

¿Por qué me sale a pagar si no estoy obligado a presentar la declaración?

El hecho de que el resultado sea a pagar suele tener una explicación. Estas son las razones más habituales:

  • Tus ingresos han tenido pocas retenciones durante el año. Por ejemplo, si trabajaste parte del año con un salario bajo o si tienes rendimientos de inversiones con retenciones mínimas.
  • Ingresos por alquileres o actividades económicas en los que no se ha retenido lo suficiente.
  • Ganancias patrimoniales que tributan al margen de tu salario, como la venta de acciones o inmuebles.
  • Deducciones no aplicadas en nómina, lo que hace que al calcular tu declaración, el resultado no sea el esperado.

Si el resultado de la declaración es negativo (a devolver), en la mayoría de los casos sí es recomendable presentarla, porque así podrás recuperar ese dinero. Sin embargo, cuando es positivo (a pagar), la situación cambia.

¿Debería presentarla aunque no esté obligado?

Si el borrador indica que tienes que pagar, la primera reacción lógica es pensar que no vale la pena presentarlo. Sin embargo, en algunos casos podría ser recomendable:

  • Si tienes deducciones aplicables en los próximos años.

    • Algunas deducciones, como la de vivienda habitual o compensaciones por pérdidas en bolsa, pueden aplicarse en ejercicios futuros.
    • Si presentas la declaración este año, podrías beneficiarte más adelante. En caso de duda, es recomendable contactar con un asesor fiscal especializado.
  • Si prefieres evitar problemas con Hacienda en el futuro.

    • Aunque no sea obligatorio, algunas personas prefieren declarar para evitar posibles revisiones en años posteriores.
  • Si quieres regularizar tu situación fiscal.

    • Si en los próximos años esperas recibir ingresos mayores y entrar en el rango de declarantes obligatorios, puede ser recomendable comenzar a presentar tu declaración de forma voluntaria.
  • Si tienes rentas extranjeras o inversiones complejas.

    • En estos casos, aunque no estés obligado, puede ser prudente presentar la declaración para asegurarte de que Hacienda tiene toda la información correcta.

En general, si el resultado es negativo para ti y no tienes ningún beneficio fiscal al presentar la declaración, puedes optar por no hacerlo sin ninguna consecuencia legal.

¿Qué pasa si decido no presentarla?

Si decides no presentar la declaración porque no estás obligado, simplemente no ocurre nada. La Agencia Tributaria no puede exigirte el pago ni imponerte una sanción. Eso sí, es importante asegurarse de que realmente no estás obligado, porque en caso contrario podrías enfrentarte a:

  • Recargos por presentación fuera de plazo.
  • Multas si Hacienda detecta que debías haber declarado. En ese caso, es muy útil saber cómo saber si tienes deudas con Hacienda.
  • Investigaciones fiscales en los años siguientes si se detectan inconsistencias en tus ingresos.

Si tienes dudas sobre tu caso, lo mejor es consultarlo con un experto para asegurarte de que tomas la mejor decisión.

La respuesta corta es: si no estás obligado, no tienes por qué hacerlo, aunque el resultado del borrador sea a pagar. No hay ninguna sanción ni problema por no presentarla en este caso.

Sin embargo, en algunos escenarios específicos, puede ser recomendable declarar, por ejemplo, si puedes aprovechar deducciones futuras o si quieres regularizar tu situación fiscal.

Antes de decidir, es recomendable revisar bien tu situación financiera, consultar a un experto si tienes dudas y asegurarte de que realmente no estás obligado a declarar.

Al final, la decisión es tuya, pero lo más importante es que no caigas en la trampa de pensar que porque el borrador diga que debes pagar, estás automáticamente obligado a presentar la declaración. No siempre es así, y en muchos casos, ignorarlo es completamente legal y sin consecuencias.

Cinco datos y estadísticas relevantes

  • Variaciones en el IRPF según la comunidad autónoma: Las diferencias en la gestión y normativa del IRPF entre las comunidades autónomas españolas resultan en que las rentas más altas pagan significativamente más en la Comunitat Valenciana (54% tipo marginal) en comparación con Madrid (45% tipo marginal). Por ejemplo, un contribuyente que gane 160.000 euros puede pagar hasta 7.000 euros más en la Comunitat Valenciana.

  • Incremento en las retenciones del IRPF para perceptores del SMI: A partir de marzo de 2025, las empresas españolas comenzaron a aplicar retenciones de IRPF en las nóminas de los trabajadores que reciben el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), el cual aumentó a 16.576 euros anuales en 14 pagas (1.184 euros mensuales). Este incremento no se acompañó de una actualización del mínimo exento de IRPF (15.876 euros), obligando por primera vez a quienes perciben el SMI a tributar.

  • Aumento en la recaudación del IRPF debido a la inflación: El Gobierno de España ha decidido no actualizar el IRPF conforme a la inflación, lo que incrementa la recaudación fiscal sin elevar los tipos impositivos. Esta «progresividad en frío» ha aumentado el tipo efectivo del IRPF del 12,8% en 2019 al 14,7% en 2023, y se espera que llegue al 15,3% en 2025.

  • Porcentaje de declaraciones con resultado a devolver: Durante la campaña de la Renta 2023, se presentaron 24.013.000 declaraciones, de las cuales el 67% (16.229.000) resultaron a devolver.

  • Plazos y recargos por presentación extemporánea: Si la declaración de la renta se presenta fuera de plazo sin requerimiento previo de la Administración, se aplican recargos que varían según el retraso:

    • Hasta 3 meses: 5% de la cantidad a ingresar.

    • Entre 3 y 6 meses: 10%.

    • Entre 6 y 12 meses: 15%.

    • Más de 12 meses: 20%, más los correspondientes intereses de demora.

Preguntas frecuentes sobre la declaración de la renta cuando no estás obligado

¿Qué pasa si no estoy obligado a declarar y me sale a devolver?

Si el borrador de tu declaración muestra que te corresponde una devolución de impuestos, puedes presentarla voluntariamente para recibir ese dinero. Aunque no estás obligado, es recomendable hacerlo para recuperar lo que la Agencia Tributaria te retuvo en exceso durante el año.

¿Qué pasa si no hago la declaración de la renta y no estoy obligado?

Si no estás obligado a presentar la declaración, no ocurre nada si decides no hacerlo. No recibirás ninguna sanción ni tendrás problemas con Hacienda. Sin embargo, si el resultado de tu declaración es a devolver, perderás la oportunidad de recuperar ese dinero.

¿Por qué mi declaración de la renta me sale a pagar?

Existen varias razones por las que tu declaración puede salir a pagar, aunque no estés obligado a presentarla. Algunas de las más comunes son:

  • Tus ingresos han tenido pocas retenciones a lo largo del año.
  • Has obtenido ganancias patrimoniales (venta de inmuebles, acciones, etc.).
  • Has recibido ingresos por alquileres o actividades económicas sin retenciones suficientes.
  • No se han aplicado correctamente deducciones o reducciones fiscales.

¿Cómo saber si es obligatorio hacer la declaración de la renta?

Para saber si debes presentar la declaración, debes revisar los límites de ingresos establecidos por la Agencia Tributaria. En general:

  • Si solo tienes un pagador, el límite es de 22.000 euros anuales.
  • Si tienes más de un pagador y el segundo supera los 1.500 euros, el límite baja a 15.000 euros.
  • Para rendimientos del capital mobiliario o ganancias patrimoniales, el límite es de 1.600 euros.
  • En casos de actividades económicas o alquileres, dependerá del tipo de ingresos obtenidos.

Puedes consultar el simulador de la Agencia Tributaria o su página web para obtener información actualizada.

¿Cómo saber si estoy exento de hacer la declaración de la renta?

Estás exento si tus ingresos no superan los límites establecidos por Hacienda y si no te encuentras en situaciones especiales que obliguen a declarar (por ejemplo, recibir ayudas públicas, vender un inmueble con ganancia, etc.). Si tienes dudas, lo mejor es revisar tu borrador en la web de la Agencia Tributaria.

¿Puedo declarar renta sin estar obligado?

Sí, puedes hacerlo de forma voluntaria si lo deseas. Esto es recomendable en los siguientes casos:

  • Si el resultado es a devolver y quieres recuperar tu dinero.
  • Si quieres acreditar ingresos para futuras gestiones bancarias o administrativas.
  • Si tienes deducciones fiscales aplicables que pueden beneficiarte en años posteriores.
  • Si prefieres mantener un historial fiscal regular ante Hacienda.

¿Qué pasa si no hago la declaración y Hacienda detecta que debería haberla presentado?

Si estás obligado a presentar la declaración y no lo haces, Hacienda puede exigirte su presentación e imponerte sanciones. Dependiendo del tiempo que tardes en regularizar la situación, pueden aplicarte recargos o multas. Si lo haces de forma voluntaria antes de que te requieran, los recargos serán menores.

¿Cuáles son los plazos para presentar la declaración de la renta?

La campaña de la renta en España suele comenzar en abril y finalizar a finales de junio de cada año. La Agencia Tributaria publica anualmente las fechas exactas para la presentación, tanto online como presencial. Es importante respetar los plazos para evitar recargos o sanciones.

¿Qué ocurre si hago la declaración y luego descubro que no estaba obligado?

Si presentaste la declaración sin estar obligado y el resultado fue a pagar, no puedes anularla sin más. Hacienda considerará la declaración válida y te exigirá el pago. En este caso, podrías intentar rectificar la declaración si detectaste errores o deducciones no aplicadas que puedan reducir el importe.

¿Puede Hacienda reclamarme en el futuro si no presento la declaración este año?

Si no estás obligado a presentar la declaración, Hacienda no te reclamará nada. Sin embargo, si en el futuro comienzas a tener ingresos superiores a los límites establecidos, es recomendable revisar bien tu situación fiscal para evitar errores. También es importante conservar documentación de tus ingresos por si la Agencia Tributaria realiza alguna comprobación.

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2 Comentarios

  • José María García Santin
    9 de abril de 2025

    Si no llego a 22000 euros anuales y vendí un piso el año pasado por menos de su valor estoy obligado a presentar la declaración ?

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